CAMBIAR LA CINTA DE UNA PERSIANA 2ª

Hay dos formas de cambiar la cinta de una persiana,de una ya hemos hablado en la primera publicación hecha sobre este tema, pues bien ahora voy a explicar como lo haremos si nos encontramos con la cinta rota y la persiana a quedado abajo, es decir, cerrada.

Lo primero que haremos será desatornillar la tapa de arriba, donde se aloja la persiana, lo haremos con un destornillador, nos encontraremos con la varilla que sujeta la persiana, veremos que hay unas cintas que unen la persiana con la varilla, las desatornillaremos, después soltaremos la cinta que va sujeta al rodillo que hay en el extremo por donde entra la cinta, nos debemos de fijar por donde entra la cinta, es decir, si la cinta llega a la polea por la parte de arriba, o por la parte de abajo, desataremos el nudo que hay en el lateral exterior de la polea y sacaremos la cinta vieja, introduciremos la cinta nueva por la ventanilla que hay en la pared y la conduciremos hasta el centro de la polea, recordemos por arriba o por abajo según estaba antes extraeremos la punta de la cinta por la ventanilla de la polea y le haremos un par de nudos, para evitar que se escape, haremos rodar la polea para que vaya entrando la cinta, la cantidad de cinta que nos debe quedar fuera debe bajar unos 20 cm más abajo del recogedor de la persiana, una vez enrollada la cinta en la polea, volveremos a atornillar las pequeñas cintas que unen la persiana con la varilla. Nos lavaremos las manos, y volveremos a colocar la tapa de la persiana. Desatornillaremos el recogedor de la persiana, Cogeremos la cinta nueva y haremos un agujerito en la cinta un centímetro antes del final, este agujerito nos servirá para fijarla en el pivote que hay en el rodillo del recogedor de la persiana, la meteremos por la ventanilla del recogedor de la persiana. Si nos fijamos, en el interior de la ventanilla veremos que hay dos varillas de metal, la cinta debe de entrar por encima de las dos varillas. Con la cinta ya introducida apoyaremos sobre nuestro pecho la placa del recogedor y comenzaremos a girar hacia delante el rodillo del recogedor, apreciaremos como se va tensando el muelle o fleje que hay en su interior, lo tensaremos hasta el máximo. Dato importante, sujetar con fuerza el rodillo cuando lo estemos tensando, si se nos escapa de las manos nos podría cortar las yemas de los dedos. Una vez tensado veremos que dicho rodillo tiene una especie de pivote. El agujero que previamente hemos hecho en la cinta tiene que ir sujeto a este pivote. Una vez colocada la cinta iremos soltando poco a poco la tensión del muelle y según se vaya girando hacia atrás se irá enrollando la cinta en él. Cuando toda la cinta se haya enrollado volveremos a colocar el recogedor en la pared con los dos tornillos.